233- ¡Hay música en la calle! El silbador de CUBA
Muchas veces, cuando algo es gratis, pasamos de largo….
Muchas veces, cuando algo es gratis, pasamos de largo….
La calle es el sitio donde ocurren las verdaderas historias, el lugar donde se cruza la gente que vive con los pies en la tierra.
En el mundo hay muchas más frutas que las que encuentras cada día en el mercado de tu barrio.
Un nuevo lunfardo que se caga en la Real Academia Española de la Lengua…
Hay cosas que no puedes dejar de vivir cuando estás de viaje.
– Mira lo que tengo –repite Basilio enseñando los dientes mientras me desvela parte de sus cartas, dos comodines de sonrisa boba vestidos como bufones medievales.
Hoy tampoco es mi día. Hoy vuelve a ser su día.
‘Atención buque. Aquí los guardacostas norteamericanos. ¿Qué carga llevan a bordo?’ La noche es una boca con todos los dientes destrozados y esparcidos en el cielo.
Imagina cuatro policías inspeccionando tu coche en busca de drogas y, mientras tanto, para que no te aburras, hay uno cantándote una rumba catalana, un chotis, un cantecito jondo o una cumbia villera…
Una de miedo. De terror. Freddy Kruger era un aficionado. La furgo colgando de cuatro cuerdas para subirla al barco que nos llevó de Colombia a Panamá.
La Tradición Wayúu de la muerte está llena de rituales, de enterramientos, desenterramientos y nuevos enterramientos, de comidas familiares en el cementerio regadas de chicha, chirrinchi, whisky y niñas vírgenes, puras, encargadas de juntar los huesos.